Muchos economistas se preocupan por el cambio climático, la economía del cuidado, y la desigualdad. Pero la macroeconomía hace que sea difícil de cuidar, y difícil de debatir acerca de ellos, ya que deja estas cuestiones de cómo se define la economía en las cuentas nacionales y en el discurso público.
Se han propuesto una serie de recomendaciones para el desarrollo de las cuentas nacionales más allá del PIB, incluyendo la incorporación de los recursos naturales existencias y flujos, con lo que en la economía del cuidado no remunerado, y poner un centro de atención en las desigualdades de ingresos de los hogares. Eso suena como mi tipo de vandalismo.
Hay, por supuesto, muchas innovaciones realmente interesantes que suceden en un intento de ampliar la métrica de las cuentas nacionales en estos aspectos, con el fin de reflejar el amplio conjunto de recursos naturales, humanos y sociales en los que la economía (y el bienestar humano) depende. Ejemplos como el intento del Reino Unido para valorar sus ecosistemas, los esfuerzos del Banco Mundial para medir el capital humano, social y natural, y el trabajo de UNRISD sobre la valoración de la economía del cuidado no remunerado.
Sin embargo, a pesar de todas estas innovaciones, ya pesar de un amplio consenso internacional sobre la necesidad de avanzar » más allá del PIB » en la evaluación de los resultados económicos, cuando la próxima camada de estudiantes de economía de primer año apareció en la universidad este otoño, que se presentarán a la misma edad diagrama del flujo circular de la contabilidad nacional que ni siquiera se dan las otras cuestiones un lugar en la página. De hecho, si los libros de texto tienen su manera, los estudiantes pueden no llegar a escuchar de estas críticas y las innovaciones en la métrica en el curso de su titulación.
Ellos merecen una mejor brújula que eso.